EL MUNDO 🔵 La familia del anciano desaparecido en Almogía denuncia que no se fue « por su propio pie », ya que la casa estaba patas arriba y había restos de sangre en el suelo

La puerta de la casa encajada, una de sus zapatillas en el suelo, sangre en la escalera y tirada en mitad de una casa revuelta la dentadura de Francisco Mayorga, conocido como Paco el del molino, el anciano de 83 de Almogía (Málaga) del que nadie sabe nada desde el sábado pasado. La familia se teme lo peor.
El sábado Paco estuvo viendo el fútbol con sus sobrinos en casa de su primo Juanma Leiva. Se quedó allí aproximadamente hasta las 23.00 horas y luego se marchó a la suya, ubicada en la misma calle y de la que apenas dista unos 30 metros.
El día estaba feo y llovía mucho, de modo que Juanma se asomó a la ventana y esperó a que Paco entrara en casa. « Desde aquí se ve su puerta », comenta a EL MUNDO, así que como « está mayor y el suelo estaba mojado, me quedé mirando por la ventana hasta que lo vi llegar a su casa, abrir la puerta y entrar« . Al primo de Paco le preocupaba que pudiese resbalarse en mitad de la lluvia y aunque el trayecto entre ambas viviendas es corto, estuvo pendiente de él hasta que llegó al portal y se puso a resguardo.
El domingo por la mañana en Almogía -un pueblo de aproximadamente 4.000 habitantes- se presentaba el cartel de la Semana Santa 2025 y Paco había quedado en ir, comenta su primo. « Nos extrañó no verlo -dice- pero pensamos que como seguía lloviendo y el día estaba muy frío, habría preferido quedarse y no salir« . Por la tarde jugaba el Málaga y a Paco lo esperaban sus sobrinos para ver el partido, pero esta vez tampoco acudió. « Eso ya nos pareció muy raro y nos preocupó », señala, así que se acercaron hasta la casa del tío Paco.
La estufa encendida
« La puerta no estaba cerrada, se abrió con un empujoncillo de nada y en el interior estaba todo patas arriba. Los cajones, abiertos y las cosas, tiradas por el suelo… Hasta la estufa se había quedado encendida », explica Juanma. En ese momento saltaron todas las alarmas: « Paco no se ha ido por su propio pie, le ha pasado algo ».
Soltero y sin hijos, la hermana que le quedaba murió y Paco el del molino pasaba la mayor parte del tiempo con sus primos y sus sobrinos, de modo que no había muchos sitios a los pudiera haber ido y en los que pudiera estar, « y menos con ese tiempo », apunta. Rápidamente llamaron a la Guardia Civil para comunicar la desaparición.
Paco no era millonario, ni tenía mucho dinero, dice su primo. « Su pensión, unas pocas tierras y algunos ahorrillos fruto de años de trabajo en el molino », precisa. Si bien es cierto que se había quejado de que últimamente le faltaba dinero en casa, recuerda Juanma. De salida no le habían dado mucha importancia porque el mismo Paco no se la había dado. « Pensamos que podía ser un despiste, sin más », relata.
Ahora la familia está convencida de que alguien se le colaba cuando no estaba o mientras dormía y le estaba robando. Para ellos todo apunta a que el sábado el ladrón o los ladrones entraron en la propiedad de Paco, se encontraron con el anciano -al que le gustaba quedarse hasta tarde viendo la tele- y se produjo un altercado fatal.
« Después de tantos días desaparecido y con este clima, nos estamos haciendo el cuerpo para lo peor », lamenta Juanma, « porque mi primo necesita una medicación que no está tomado ». Además, « si se lo llevaron y lo dejaron tirado por ahí con el frío y la lluvia, ¿qué puede uno pensar? », añade.
Dos detenidos
Hasta la fecha hay dos personas de Almogía detenidas en relación a la desaparición e investigadas por robo -« unos prendas a los que todo el mundo conoce en el pueblo », dice la familia- pero la realidad es que sigue sin haber rastro de Paco, al que la Guardia Civil sigue buscando.
Los agentes han rastreado este martes unos terrenos, propiedad del desaparecido, en la zona del Castillo, y también están revisando las parcelas donde se ubicaba su antigua fábrica de aceite.
« El pueblo está consternado », ha comentado a este diario su alcaldesa, Antonia Rocío García, « aquí todos nos conocemos y Paco era una buena persona, educado y amable, que no tenía problemas con nadie. La noticia de su desaparición nos ha impactado mucho », añade. « Desde que empezó el año no levantamos cabeza », ha lamentado la regidora.